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Reseña de resultados Abril 12, 2019

Promover la seguridad vial en Argentina

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Martin del Santo/Banco Mundial


El gobierno argentino llevó a cabo un ambicioso proyecto de seguridad vial con asistencia técnica y un préstamo del Banco Mundial. Un conjunto exhaustivo de actividades en todo el país fortaleció el marco institucional y la capacidad de gestión para la seguridad vial en Argentina, ayudando a estabilizar la tasa de mortalidad vial.

Desafío

En 2011, las Naciones Unidas declararon la “Década de Acción para la Seguridad Vial” como forma de enfrentar esta crisis global de salud pública con el objetivo de estabilizar y reducir la mortalidad vial en un 50 por ciento para 2020. Sin embargo, en Argentina —como en la mayoría de los países de América Latina—, a medida que la motorización y los viajes motorizados aumentaron, también lo hicieron los accidentes y la mortalidad vial. Para 2010, la Organización Mundial de la Salud informó 5094 muertes por accidentes de tráfico en Argentina. Debido a la falta de notificación y diferencias en las definiciones, las estadísticas oficiales nacionales fueron ligeramente más bajas, registrando 4950 muertes viales, si bien ambas cifras son muy preocupantes. Así mismo, la tendencia no muestra visos de una desaceleración sostenida; las muertes viales aumentaron de manera consistente en alrededor del 20 por ciento entre 1980 y 2010. Los desafíos en términos institucionales y de coordinación fueron particularmente serios debido a la estructura del gobierno federal argentino. Asimismo, el incremento en las lesiones por accidentes viales también requería una respuesta sólida y sostenida por parte de la sociedad civil.

Enfoque

Este plan es uno de los pocos proyectos de seguridad vial autónomos del Banco Mundial y su éxito se debió, principalmente, a su enfoque en fortalecer y luego sostener la capacidad de gestión de la seguridad vial en el país a través de un modelo de organismo rector. Para este proyecto, el organismo rector fue la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV). La experiencia internacional en países de alto ingreso muestra que un enfoque coordinado para mejorar la gestión y la implementación de medidas específicas de seguridad vial, bajo la responsabilidad de un organismo rector, puede lograr estabilizar y eventualmente reducir las muertes y lesiones por accidentes viales. Por ende, el proyecto llevó a cabo un conjunto amplio de actividades en todo el país. El papel del organismo rector en las principales actividades del proyecto, como el establecimiento y despliegue de una Licencia Nacional de Conducir, realización de campañas de comunicación y educación, así como el fortalecimiento del Observatorio Vial Nacional, fue decisivo para determinar su responsabilidad en torno a la seguridad vial nacional. De esta manera, la ANSV fue capaz de asegurar una coordinación multijurisdiccional y multisectorial a nivel federal, allanando el camino para la puesta en marcha de otros componentes del proyecto, como la vigilancia policial de factores de riesgo claves (exceso de velocidad y uso del cinturón) y una mejor infraestructura (rotondas, zonas escolares, intersecciones señalizadas y señalización vial).


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5094 muertes

Para 2010, la Organización Mundial de la Salud informó 5094 muertes por accidentes de tráfico en Argentina.


Resultados

Los fallecimientos por accidentes viales en Argentina aumentaron si pausa hasta 2011; desde entonces la cifra se mantiene relativamente estable (entre 5000 y 5500 muertes por año). Este es un logro significativo: dado el crecimiento estimado, hubieran ocurrido 814 muertes adicionales en 2015 y 397 en 2016, comparando con las cifras reales. 

El número de muertes en los tres corredores piloto se redujo en un 22,92 por ciento en 2017 y un 30,91 por ciento en 2016; el número promedio de lesiones graves en los tres corredores fue un 14,62 por ciento menor en 2017 que en 2010 y un 36 por ciento por debajo de la cifra de 2016. Un análisis de los factores de riesgo en los “Corredores seguros” también brinda resultados interesantes. El uso del cinturón de seguridad aumentó, alcanzando el 95,5 por ciento en 2017, comparado con el 67,2 por ciento en 2010 y una tendencia nacional de alrededor del 40 por ciento. En los corredores piloto, la observancia de los límites de velocidad mejoró del 88,6 por ciento al 99,3 por ciento a lo largo de la duración del proyecto.

Los siguientes resultados finales e intermedios, entre otros, contribuyeron a alcanzar los objetivos del proyecto: 

  • Implementación gradual de la Licencia Nacional de Conducir, con 15.656.358 de licencias de nivel alto otorgadas a junio de 2017. 
  • Se realizaron 4632 campañas de seguridad vial (1379 maestros de escuela y 18.997 alumnos fueron capacitados en 588 campañas durante el primer semestre de 2017); y 310 talleres de capacitación para unidades de control de tráfico (7773 agentes entrenados en los últimos cuatro años del proyecto).
  • La policía de carreteras y la ANSV participaron en 180.000 operaciones conjuntas, mientras que se implementaron sistemas de información de lesiones viales en 50 hospitales.
  • Se brindó apoyo técnico a más de 147 jurisdicciones en 19 de las 24 provincias del país, mientras que hasta junio de 2017 se elaboraron 262 planes de seguridad vial.

Contribución del Grupo del Banco

El Banco Mundial, a través del Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento (BIRF), proporcionó US$30 millones para este proyecto. Este esfuerzo ayudó a reducir el número de lesiones y muertes viales en el territorio argentino al fortalecer el marco institucional y capacidad de gestión para la seguridad vial en el país. El número de accidentes viales se redujo fuertemente en los corredores piloto seleccionados.

Socios

  • La colaboración del gobierno argentino, junto a los gobiernos provinciales y municipales, contribuyó al éxito de la agenda de seguridad vial multijurisdiccional. 
  • La Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV), la policía de carreteras (180.000 operaciones conjuntas policía de carreteras - ANSV) y el Ministerio de Salud (50 hospitales con sistemas de información sobre lesiones viales).
  • La Dirección General de Tráfico de España brindó oportunidades de intercambio de conocimientos. 
  • El Foro Internacional de Transporte (OCDE) respaldó la participación de Argentina en el Grupo de la Base de Datos Internacional de Accidentes de Tráfico (IRTAD, por sus siglas en inglés), que proporcionó mejores prácticas para el establecimiento del observatorio de la ANSV.
  • Organizaciones de la sociedad civil de toda Argentina contribuyeron a la estructura de gobernanza de la ANSV a través del Comité Consultivo. 
  • Concesionarios privados brindaron demostraciones de seguridad en los tres corredores piloto seleccionados. 

Beneficiarios

El proyecto apoyó a organizaciones de la sociedad civil argentina en la elaboración de campañas de educación, concientización y comunicación para contribuir a una reducción en el número de lesiones y muertes causadas por accidentes de tránsito. “A pesar del hecho de que los accidentes viales son la principal causa de muerte entre personas de 15 a 25 años de edad, la seguridad vial no es un problema grave para los jóvenes”, indica Lucila de la Serna, presidente de la Asociación Conduciendo a Conciencia: Familiares y Amigos de Víctimas de la Tragedia de Santa Fe. Bajo este proyecto, la ONG redactó un libro para alumnos de 2.o y 3.er grado y comenzó a trabajar con maestros de escuela de la provincia de La Pampa. “Pronto publicaremos una versión en línea del libro para que pueda llegar a un número mayor de escuelas”, explica De la Serna.

MiNU Asociación Civil es otra entidad benéfica que trabaja con escuelas secundarias a través de su proyecto Jóvenes Construyendo y Debatiendo la Seguridad Vial, centrado en las escuelas públicas de la ciudad de Buenos Aires y en cinco áreas del Gran Buenos Aires. “A través de un programa dinámico y participativo, como el de pretender ser legislador por un día, logramos involucrar a los jóvenes en la compleja realidad de la seguridad vial”, comentó el director de la entidad, Martín Galanternik.

El municipio de Urdinarrain en la provincia de Entre Ríos, con unos 10.000 habitantes, fue uno de los beneficiarios institucionales más exitosos del proyecto gracias al apoyo del Fondo de Incentivos para la implementación de políticas y proyectos de seguridad vial sobre el terreno. Luego de adherirse al sistema de licencia nacional de conducir, Urdinarrain pudo (i) obtener fondos para elaborar un plan de seguridad vial, (ii) desarrollar capacidades entre las autoridades involucradas en seguridad vial a través de viajes de estudio a la Dirección General de Tráfico en España y (iii) obtener apoyo para la implementación de medidas de bajo costo para la pacificación del tránsito e inspecciones de seguridad vial en áreas escolares. Urdinarrain fue el primer municipio de la provincia de Entre Ríos en sumarse e implementar el sistema de licencia nacional de conducir y en hacer valer leyes contra la conducción en estado de ebriedad. De acuerdo a las autoridades locales, el 99 por ciento de los motociclistas ahora usa casco, en tanto en 2017 no hubo ninguna muerte o lesión grave por causas viales. 

Hacia adelante

La Agencia de Seguridad Vial fue institucionalizada y fortalecida y ahora puede coordinar la agenda nacional de seguridad vial de forma interjurisdiccional; se asignó financiamiento sostenido para asegurar su continuación. Así mismo, el proyecto se diseñó para demostrar su éxito en corredores seleccionados, con el objetivo de reproducir este éxito en toda la red vial; Argentina ya está llevando a cabo esta expansión a través de una gran asociación público privada (APP) focalizada en rutas seguras, con seis contratos APP para corredores viales ya rubricados, centrados principalmente en la seguridad vial. Por último, luego de solicitudes regionales de apoyo para recrear el enfoque argentino de gestión de la seguridad vial, el Banco está ampliando sus esfuerzos mediante apoyo financiero y técnico para la creación del marco inicial y la plataforma web del Observatorio Iberoamericano de Seguridad Vial, que facilita el intercambio, divulgación y análisis de los datos y también conecta a los países miembro con los recursos de la IRTAD.